Generalmente cuando se habla de valor económico de la empresa se piensa que la entidad se encuentra en venta, pero no necesariamente es así. Las valoraciones económicas no deben hacerse solamente en el momento de buscar un socio nuevo o en el momento de pretender vender la empresa. Es importante cada determinado tiempo hacer valoraciones con el fin de identificar el valor agregado por la empresa, tal y como lo indican indicadores como el EVA (Valor Económico Agregado o Economic Value Added) sino que en al conocer el valor económico, esto nos presenta una luz de cómo ha crecido nuestra inversión inicial y si la gestión de la administración, así como las decisiones y planeación estratégica ha sido efectiva.
De igual manera calcular el valor económico de la empresa sirve para identificar puntos financieros donde se pueden ejecutar estrategias desde la gerencia que incrementen los flujos de caja libre o como hacer más eficiente los recursos invertidos en el recambio del capital de trabajo.
En términos generales, cuando se hace una valoración de empresas y este trabajo se hace a fondo, conlleva igualmente un análisis no solo de la parte cuantitativa o contable, sino que también se evalúa la estrategia de la gerencia, como la planeación estratégica agregará valor en el futuro, como está organizada la compañía, cual es su organigrama, como esta estructurada su operación en general e incluso y lo más importante por cuanto tiempo con ese modelo de negocio se podrán generar flujos positivos (permanencia en el futuro y para la valoración significa cuantos periodos se van a tomar antes de calcular perpetuidad en los cálculos).